Esordisco con un promemoria per aiutare gli smemorati. Ricordo che con un semplice articolo, inserito all’ultimo istante, l’art. 4 del decreto legge n. 137/2008 dal titolo “Disposizioni urgenti in materia di istruzione e università“, meglio noto come Decreto Gelmini, il governo ha reintrodotto la figura del “maestro unico”, azzerando trent’anni di organizzazione e buon funzionamento della
scuola elementare. Un’istituzione che, in base alle statistiche internazionali, ha sempre dimostrato di funzionare molto bene, collocandosi ai vertici delle graduatorie mondiali.
Il Decreto è, a tutti gli effetti, una legge dello Stato, essendo stato pubblicato sulla Gazzetta Ufficiale del 1° settembre 2008. Con l’inizio, ormai imminente, del nuovo anno scolastico, si annuncia una vera “rivoluzione” nell’assetto organizzativo e didattico della scuola primaria, una “riforma” imposta con una decisione unilaterale, senza alcun confronto con i sindacati e le varie componenti del mondo della scuola, senza consultare nemmeno il Consiglio nazionale della Pubblica Istruzione, senza alcuna riflessione di natura teorica, giuridica e tantomeno pedagogica.
Il ministro ha pensato di imporre dall’alto la resurrezione del maestro unico, malgrado siano trascorsi all’incirca vent’anni da quando, con l’istituzione dei moduli organizzativi, questa figura è stata abolita, estendendo a tutta la scuola elementare le pratiche di collaborazione e condivisione di responsabilità tra i docenti, maturate nella sperimentazione del tempo pieno.
L’ordinamento della scuola elementare, fondato sulla pluralità docente, ha consentito agli insegnanti di affinare le proprie competenze didattiche, ha favorito la diffusione di uno spirito di cooperazione, rendendo la scuola elementare una comunità dialogante, ricca di risorse umane e professionali, di stimoli e conoscenze. La pluralità dei docenti, ossia dei modelli educativi, comportamentali e culturali, ha offerto un arricchimento in termini di atteggiamenti, valori e apprendimenti, maturando una crescente apertura verso la complessità multiculturale del mondo contemporaneo.
Ma non c’è solo la restaurazione del maestro unico a destare preoccupazione. Il ritorno all’antico sembra essere una moda, uno stile di questo governo, non solo sul fronte della politica scolastica. Appare chiaro che la Gelmini è una sorta di “ministro ombra” e che la politica scolastica la detta
Tremonti. Ricordo un articolo che Tremonti ha inviato al Corriere della Sera il 22 agosto 2008, intitolato "Il passato e il buon senso", in cui il ministro dell’economia anticipava i temi dei voti, dei libri di testo e del numero dei docenti per classe, indicando la linea da seguire alla Gelmini.
Sul piano occupazionale le conseguenze sono devastanti e si prospetta una vera macelleria sociale. Nel complesso è stato calcolato che il taglio di insegnanti solo nella scuola elementare, per effetto della restaurazione a regime del maestro unico, sommerebbe ad oltre 80mila posti, ma saranno i
precari ad essere massacrati.
Pertanto, il governo insegue semplicemente un ritorno al passato che gli permetta di fare cassa, riscuotendo nuovi introiti a scapito della già malconcia scuola pubblica, mentre le risorse finanziarie vengono dirottate altrove. Scimmiottando con 30 anni di ritardo il modello anglo-americano, cioè le politiche neoliberiste che hanno ispirato le amministrazioni ultraconservatrici di Margaret Thatcher in Gran Bretagna e Ronald Reagan negli USA, il piano del governo Berlusconi è di subordinare la scuola pubblica agli interessi e al servizio del mercato del lavoro. La conseguenza inevitabile sarà lo smantellamento della scuola pubblica, per concedere una formazione d’eccellenza ad una platea sempre più elitaria e procurare una manodopera crescente a basso costo proveniente dalle scuole pubbliche, riservate alle masse popolari.
Questo è ciò che senza indugi il duo Tremonti/Gelmini intende fare del sistema di istruzione del nostro Paese. Una scuola dove il binomio competenze/conoscenze viene cancellato e sostituito dalla voce abilità. Una scuola sempre più simile ad una sorta di “supermercato” dell'offerta educativa e sempre meno comunità educante.
Lucio Garofalo
http://www.usi-ait.org/index.php?option=com_content&view=article&id=193:la-gelmini-e-il-nuovo-anno-scolastico&catid=1:ultime&Itemid=50
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Gelmini del nuevo año escolar
Comienza con un recordatorio para ayudar a los olvidadizos. Recuerdo que con un simple artículo, insertado en el último momento, el arte. 4 del Decreto Ley 137/2008, titulado "Disposiciones urgentes para la educación y las universidades", mejor conocido como el decreto Gelmini, el gobierno ha vuelto a introducir la figura del "maestro único", eliminando de treinta años de organización y funcionamiento de la escuela primaria. Una institución que, de acuerdo a las estadísticas internacionales, siempre ha demostrado funcionar muy bien, colocar en la parte superior de los rankings mundiales.
El decreto es, en efecto, una ley estatal, al haber sido publicado en la Gaceta Oficial del 1 de septiembre de 2008. Con el inicio, ya inminente, el nuevo año escolar promete ser una verdadera "revolución" en la organización y la enseñanza de la escuela primaria, una "reforma" impuesta por una decisión unilateral, sin ningún tipo de confrontación con los sindicatos y los diferentes componentes el mundo de la escuela, sin consultar con el Consejo Nacional de Educación, sin tener en cuenta teórico, legal, por no hablar de la enseñanza. El ministro ha decidido imponer a partir de la resurrección de maestro de una parte, a pesar de que pasa alrededor de ventilación " Desde entonces, con la creación de formas de organización, esta cifra ha sido retirado, se había extendido a todas las prácticas de la escuela primaria de la colaboración y la responsabilidad compartida entre profesores, obtenida en la prueba de tiempo completo. El orden de la escuela primaria, basado en el profesor la pluralidad, ha permitido a los maestros a mejorar sus habilidades de enseñanza, ha favorecido la difusión de un espíritu de cooperación, la educación primaria común dialogar, de los ricos recursos humanos y el estímulo profesional y el conocimiento. La pluralidad de los profesores, que son considerados como modelos de la educación, de comportamiento y enriquecimiento cultural que ofrece en términos de actitudes, valores y el aprendizaje, el desarrollo de una creciente apertura a la complejidad multicultural del mundo contemporáneo. Pero no es sólo la restauración del único maestro de preocupación. El retorno a la antigua parece ser una moda, un estilo de este gobierno, no sólo en el frente de la política de la escuela. Parece claro que la Gelmini es una especie de "ministro en la sombra" y que la política de la escuela que el Tremonti. Recuerdo un artículo que Tremonti ha enviado al Corriere della Sera, 22 de agosto de 2008, titulado "El pasado y el sentido común" en la que el ministro de Economía anticipa los temas de la votación, los libros de texto y el número de profesores por clase que indica la línea a adoptar las Gelmini. Sobre las consecuencias del empleo son devastadoras y las promesas de una oficina de carnicero real. En general, se calculó que el corte sólo en los maestros de escuelas primarias, como resultado de la restauración en régimen de pago único del amo sobre 80 mil puestos, pero será precaria a ser masacrados. Por lo tanto, el Gobierno persigue un simple retorno al pasado que le permite obtener dinero, obtener nuevos ingresos, en detrimento de la escuela pública ya maltratadas, mientras que los recursos financieros sean desviados a otra parte. Imitando con 30 años detrás del modelo anglosajón, es decir, las políticas neo-liberales que llevaron a la ultra-gobierno conservador de Margaret Thatcher en Gran Bretaña y Ronald Reagan en los EE.UU., el plan del gobierno de Berlusconi es vincular a las escuelas públicas y servicio de los intereses mercado de trabajo. El resultado inevitable será el desmantelamiento de la escuela pública de excelencia para impartir formación a un público cada vez más elitista y proveer una fuerza laboral cada vez más a bajo costo proveniente de las escuelas públicas, reservado para las masas. Eso es lo que el dúo de inmediato Tremonti / Gelmini tiene por objeto hacer que el sistema educativo de nuestro país. Una escuela donde el emparejamiento de competencias y conocimientos se suprime y se sustituye por la capacidad de voz. Una escuela más como una especie de "supermercado" de la oferta educativa y la comunidad educativa menos.
Lucio Garofalo
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***La traducción del texto no esta perfecta pero al menos se entiende la idea general del texto..
Si alguien sabe de algun error que haya cometido que me lo comunique.
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